Contaminación Electromagnética: ¿Puede ser peligrosa?

La polución de la Contaminación Electromagnética, se ha vuelto cada vez mayor y suele estar presente en los países más modernos del mundo.

La Contaminación Electromagnética que está actualmente presente en la mayoría del mundo entero es un tema muy poco discutido. Por desgracia, tiene efectos muy negativos sobre la salud de los seres vivos. Todo esto se notará más en aquellos lugares en los que se hace más frecuente el uso excesivo de tecnologías de la información, el WiFi, los móviles, entre otros equipos que generan radiaciones.

¿Las radiaciones pueden representar un peligro para la salud?

Sí, sin duda alguna. La conexión a Internet se ha vuelto cada vez mayor, nos hemos vuelto dependientes del envío de SMS, redes sociales y otras mensajerías instantáneas. Por lo tanto, estamos más tiempo con un dispositivo en la mano. 

Todos estos campos electromagnéticos pululan a nuestro alrededor, pudiendo representar un peligro inminente no solo para la salud, sino también para el medioambiente.

Cabe resaltar que cualquier materia, bien sea una pared o el cuerpo humano, puede absorber con facilidad esa radiación. El auge que en los últimos años ha venido creciendo con las comunicaciones inalámbricas, ha generado una ingente exposición de los humanos al CEM.

De hecho, es tan grave que nadie podría escapar de ese influjo, puesto que las antenas, el Bluetooth y las zonas WiFi, emiten ondas que se encuentran y se esparcen por todas partes y en todo momento. Lo peor de todo esto, es que se ha superado los límites establecidos de emisión saludable.

¿Qué ocasionan los CEM en la salud?

La exposición a las redes inalámbricas y de telefonía es global y no individual, debido a esto, existen registros que dan testimonio acerca de los efectos negativos que tiene la Contaminación Electromagnética en la salud.

Durante las últimas 3 décadas, han surgido miles de estudios que destacan los distintos efectos biológicos que genera la contaminación electromagnética. Incluso, en el 2011, la Organización Mundial de la Salud clasificó a la radiación no-ionizante como un posible cancerígeno del tipo 2B. El informe Bioinitiative también destaca múltiples efectos biológicos de la exposición a ciertos niveles de intensidad y frecuencia.

Sin embargo, el problema raíz que generan las radiaciones electromagnéticas son las respuestas de estés celular en el organismo (estrés oxidativo) que, a su vez, causa inflamación. Se ha determinado que la inflamación es el origen de, al menos, 75 afecciones de salud mayores. Es esta alteración a nivel celular el gran problema de la exposición a los CEM, puesto que afecta por igual a todos los sistemas biológicos y todas las enfermedades potencialmente peligrosas se generan a ese nivel fundamental.

¿Puede la alta exposición a las radiaciones ocasionar cáncer y tumores cerebrales?

Según estudios del NTP (National Toxicology Program), la exposición a radiaciones electromagnéticas por radiofrecuencia podría tener un fuerte enlace con el desarrollo de tumoraciones malignas y un raro tipo de cáncer cerebral en roedores, cuyas similitudes biológicas con los humanos los han convertido en indicadores útiles de los riesgos para la salud humana.

Diversos estudios a lo largo de los años han apuntado en la misma dirección, sugiriendo que podría existir un enlace entre la exposición a campos electromagnéticos de fuentes artificiales y el desarrollo de distintos tipos de cáncer a largo plazo.

Lo cierto es que muchos expertos creen que aún es muy pronto para determinar la magnitud de los efectos de estar expuestos a estas radiaciones durante toda una vida, señalando el hecho de que los teléfonos celulares se han hecho de uso público y masivo por no más de 30 años.

¿Cuál es la clasificación de los efectos negativos de la radiación y los campos electromagnéticos?

Los efectos nocivos de la radiación en la salud suelen clasificarse de la siguiente manera:

  • Térmicos: la secuela que siente la persona afectada es muy similar a un fuerte golpe de calor y suele suceder cuando las ondas, tienen una alta intensidad. Es considerado como un efecto térmico cuando experimenta un aumento de la temperatura corporal de mínimo un grado. Otros de los síntomas que se presentan son, náuseas, quemaduras, esterilidad y dolores de cabeza constantes. Estos efectos están relacionados con radiaciones ionizantes y, por años, se ha creído que la radiación no-ionizante es inofensiva porque sus efectos térmicos son tan pequeños, que son despreciables.
  • No térmicos: los efector no térmicos o atérmicos se general a nivel celular. No hay quemaduras o signos visibles en la mayoría de los casos, pero las células se están viendo afectadas por una producción excesiva de radicales libres, así como una polarización que no es compatible con su potencial natural. Esto desemboca en afecciones a largo plazo y, a corto plazo, malestares diversos en las personas más sensibles. 

¿La tecnología 5G para celulares tiene algún riesgo representativo para la salud?

Desde hace algún tiempo, la red de telefonía celular 5G comenzó a ser utilizada en algunas de las ciudades más modernas del mundo. Esto, ha generado cierta inquietud en algunas personas, teniendo la duda acerca de si esta nueva tecnología podría representar riesgos para la salud. Al igual que las redes de teléfonos móviles que ya conocemos, esta nueva red 5G depende de las señales que suelen enviar las ondas de radio. Estas forman parte del espectro electromagnético que son transmitidas mediante una antena de comunicaciones y un dispositivo móvil.

Generalmente, todos los habitantes de estas ciudades están rodeados de las radiaciones que van desde las señales de radio y televisión, hasta los diferentes tipos de tecnologías, entre las que se incluyen los teléfonos celulares y los de fuentes naturales como lo es la luz solar. A diferencia de las redes que ya conocemos, la tecnología 5G debería funcionar en frecuencias mucho más altas para permitir que los dispositivos móviles puedan tener un mejor acceso a internet en todo momento y velocidades más rápidas de lo normal.

Todas estas onda  viajan a distancias más cortas en los espacios urbanos, por lo tanto, las redes 5G, necesitan de más torres de transmisión que las tecnologías anteriores. Además de ello, deben estar ubicadas más cerca de la superficie terrestre, por ende, más cerca de las personas. Alrededor de todas estas novedades, se han creado muchas matrices de opinión distintas, algunas con preocupaciones genuinas, otras movidas por teorías de conspiración y desinformación, otras esparciendo miedo con base en información falsa, y muy pocos educando sobre lo que realmente es y cómo manejarlo.

La verdad es que, aunque las 5G están diseñadas para funcionar en ondas milimétricas (sobre 30 GHz), las redes desplegadas hasta hoy no son muy distintas al 4G o al WiFi que conocemos y usamos a diario, que provocan efectos biológicos también. Si bien algún día conoceremos la 5G milimétrica, parece ser que ese día aún no está cerca, y los efectos biológicos no serán muy distintos a los que ahorita mismo sufrimos.

¿Qué opina la OMS de la radiación por electromagnetismo?

En el año 2014, la OMS había publicado un artículo en el que decían que todavía no se había establecido científicamente los efectos adversos que podrían causar en la salud, el uso de los teléfonos celulares. No obstante, la Organización Mundial de la Salud en conjunto con la Agencia Internacional para la Investigación de Cáncer (IARC), llegó a clasificar la radiación de las frecuencias de radio, como que son «posibles carcinógenos».

La han ubicado dentro de esta categoría por la razón de que, la evidencia que hay, no es suficiente para concluir de que la exposición a ella podría causar cáncer en los seres humanos.