Tecnología de red 5G y su relación con los CEM

Ha surgido un debate en cuanto a los efectos que pueden producir en los humanos los CEM provocados por la nueva red 5G

Cada día el mundo avanza más hacia las tecnologías que pueden cubrir todas las necesidades de una sociedad, pero que aumenta la exposición a los CEM (campos electromagnéticos). Ahora, con la adopción de la denominada red 5G y el uso del espectro en ondas milimétricas (mmWave), ha activado las alertas entre los especialistas con respecto a una información que podemos decir que es anómala.

¿Qué es la red 5G?

Esta es una nueva generación de tecnología móvil, que se está encargando de transformar el papel fundamental de la conectividad. Ha sido especialmente diseñado con el fin de facilitar el uso de las nuevas aplicaciones mediante velocidades de transmisión de datos de una serie de gigabits/seg.

Del mismo modo, con una baja latencia y gran confiabilidad, brindando soporte eficiente a las conexiones. Esto hace posible el buen funcionamiento del IoT (Internet de las Cosas)Hablando más en términos técnicos, esta red ofrece una mayor velocidad de transmisión de datos, pudiendo ser hasta 100 veces más rápidas que las redes móviles que hemos conocido hasta el momento.

Admite de forma instantánea el acceso a los servicios y aplicaciones, mediante una latencia de red mucho menor. Tiene una función de división de red, conocida con el término network slicing, la cual permite ofrecer una parte exclusiva de una señal 5G a algún servicio en particular, de manera independiente.

¿Cómo funciona la red 5G?

Este tipo de red usa una combinación de tecnologías de antenas inteligentes y de celdas pequeñas, que se encargan de enviar las señales radioeléctricas. Por ejemplo, la cobertura que ofrecen las antenas convencionales, es comparable en el que un reflector ilumina una superficie amplia. Mientras tanto, las nuevas antenas se pueden comparar con las linternas, solo dan cobertura a donde haga falta, reducir las señales que no son necesarias.

En pocas palabras, lo que hacen es aumentar su capacidad y mejorar la eficiencia. Todas las redes móviles de hoy en día, utiliza celdas pequeñas para brindar una cobertura localizada. El uso de estas celdas se incrementará con la red 5G. Se pueden instalar en el alumbrado público o bien en el interior de los edificios, en los que se registra el 80% del uso de los servicios móviles dentro de los mercados desarrollados.

¿La tecnología móvil es realmente segura?

Durante muchos años, algunos expertos han estudiado las señales radioeléctricas que utilizan las tecnologías móviles. Las frecuencias que son usadas por estos dispositivos funcionan según las reglamentaciones nacionales y también, por las directrices internacionales que van en base a la exposición que se tiene a los campos electromagnéticos que emanan todas las bandas usadas y, consideradas para la señal 5G.

Para el año 2020, la ICNIRP (que en español significa «Comisión Internacional de Protección de Radiación no Ionizante»), realizó una declaración acerca de las directrices de 1998, asegurando que aún no brindan la protección necesaria en contra de los efectos conocidos de la radiación de alta frecuencia en la salud y en el medio ambiente.

¿Es mala la red 5g? Los riesgos a los humanos están en un rango de frecuencia de 100 kHz – 300 GHz. Cabe destacar que, esta red usa bandas que están por debajo de 1 GHz, 1-6 GHz y por encima de 6 GHz. En cuanto a los límites finales, para los dispositivos de transmisión de radiofrecuencia, dispositivos móviles públicos y tabletas que son de uso, no son modificados por debajo de los 6 GHz.

Con la actualización realizada en 2020, se siguieron pautas adicionales para las bandas superiores a los 6 GHz. La misma ha sido anticipada por la industria por un tiempo, habiendo métodos de prueba con el fin de garantizar el fiel cumplimiento de los dispositivos con red 5G dentro del mercado.

Tanto los centros de salud públicos como los grupos de expertos, aseguran que estas directrices protegen a las personas de los posibles riesgos que estas señales pueden repercutir en la salud.

¿Puede aumentar mi riesgo de exposición a las ondas electromagnéticas de las redes 5G?

Hay la posibilidad de un ligero aumento localizado en los niveles de exposición, al agregar una red 5G a un emplazamiento o cuando se ofrece una cobertura en un espacio nuevo. A pesar de ello, en la 5G los niveles de riesgo total se mantienen por debajo, siendo muy bajos en comparación con los límites de establecidos por las directrices internacionales en cuanto a seguridad se refiere.

Los resultados que dieron las detectadas en dichas redes, tanto comerciales como de prueba, arrojaron que los niveles de exposición, son similares a los de los servicios móviles que ya conocemos. Todas las nuevas características de la red 5G facilitan una mayor capacidad para satisfacer la demanda de los usuarios.

De esa forma, se van a requerir de algunas antenas adicionales y de aumentar el número de instalaciones de celdas pequeñas. No obstante, los sistemas móviles de comunicaciones están debidamente diseñados para disminuir la potencia y aplacar un poco la interferencia de las señales.

¿Cómo proteger a los niños que se pueden ver afectados con las ondas electromagnéticas de estas redes?

Entre las revisiones científicas independientes que se han realizado, concluyeron que las directrices internacionales ofrecen una protección tanto a personas adultas como a los niños a la red 5G.

Pese a todo esto, en la actualidad no hay muchos estudios científicos en niños donde abarquen una amplia diversidad en patologías para descartar; sigue siendo un tema de investigación abierto. En este sentido, podemos decir que, las normativas internacionales acerca de la exposición han sido desarrolladas, en un principio, en base a los parámetros conservadores con el fin de proteger a todas las personas en general.

Lo que recomiendan los gobiernos de algunos países es el de tomar en cuenta algunas restricciones voluntarias y preventivas con respecto al uso de los teléfonos móviles y el WiFi en los niños de menor edad. Muchos científicos expertos en el tema también han recomendado ajustar los parámetros de las pruebas de seguridad actuales, como el Specific Absorption Rate (SAR) Test, al tamaño y características específicas de un niño, pues las directrices y valores actuales están diseñados considerando las carácterísticas de cuerpos adultos y completamente desarrollados. 

Por tal motivo, se aconseja limitar las exposiciones prolongadas a estas radiofrecuencias en el caso de que hubiera algún riesgo de salud no conocido.

Recomendaciones de la OMS y otras instituciones

Además de la Academia Americana de Pediatría que, orienta a los padres con consejos de cómo cuidar la salud de sus hijos; por su parte, la OMS ha indicado sugerencias sobre la exposición de los niños a los equipos electrónicos y el tiempo diario en que pueden o deban estar expuestos a esas ondas; para proteger su integridad mental, física y cognitiva. No exponerlos antes de los 2 años y después de esa edad, hasta los 5 años y así, supervisar el horario o cuánto duran utilizando los dispositivos electrónicos (máximo una hora del día).

Al pasar los 5 años, dos horas de exposición máximo hasta que cumplan los 12 y, posteriormente, más allá de estar pendiente del tiempo que pasan ante un móvil u ordenador, hay que planificar/supervisar con mayor ahínco es el tipo de contenido que puedan ver; para cuidar sus derechos como niños y adolescentes ante los riesgos de la exposición a la tecnología (Según la UNICEF). Antes de dormir, sí es bueno que todos evitemos el uso de dispositivos móviles por lo menos media hora antes.

Con el fin de proteger a los niños de los posibles efectos causados por los móviles, además del uso apropiado de tecnologías de filtrado como SPIRO, que evita efectos biológicos negativos en los usuarios, es también muy importante impartirles un uso responsable de la tecnología y controlar su exposición directa hasta la mayoría de edad, puesto que aún se desconocen la totalidad los efectos que la exposición continua podría causar en ellos a largo plazo.

En cuanto a las mujeres embarazadas, también se sugiere el uso de tecnologías filtrantes y un uso responsable de tecnologías, ya que estudios afirman que la exposición a CEM podría provocar efectos biológicos en el feto que podrían comprometer su desarrollo apropiado.